La entrada fue a las 6 de la tarde. Los casó el Padre Diego Díaz Pumara, con la música  de Marea Ensamble Vocal. La entrada fue al son de  “God Only Knows” de The Beach Boys y la salida con la alegría de “Shiny Happy People”.

La Fiesta

La fiesta fue a las 10 de la noche los jardines del castillo. La increíble decoración de Antera Estudio, toda en rojo y blanco muy teatral. “La ambientación de esta boda fue inspirada en los elementos del castillo. El ladrillo como disparador de la paleta de colores. Las estatuas, que integramos a la carpa, nos inspiraron a crear nuevas piezas cubiertas en tela. Los textiles como guía para toda la puesta, jugando con la idea de cubrir todo, como cuando se cubren de sábanas y telas los muebles de una casa que ya no se habita. La pieza central que coronó la puesta fue la instalación de la pista, una bola gigante también cubierta por una gran tela que luego cayó y dio espacio al baile. Telas estampadas a pedido y piezas de mobiliario fabricadas especialmente para esta boda terminaron de darle el carácter a esta ambientación” contaron los encargados Antera.

Santi Fernández Saenz puso la música y la y el servicio de comida fue de Tree Catering.

Pero la gran sorpresa de la nochefueron: Los Auténticos Decadentes en vivo.

Después de la fiesta los novios pasaron la noche de bodas en el hotel Villa San Gimignano en San Isidro y de luna de miel viajarona  Japón y Corea.

Lo mejor del casamiento: “prepararlo, pensarlo y la mejor sorpresa los autenticos decadentes en vivo”, contó Malena.